Operación bikini: medicamentos para adelgazar

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A todo el mundo le gusta lucir tipo, y el verano es una época propicia para ello. Esto provoca que en estas fechas se empiece la operación bikini, es decir, a poner en práctica los falsos mitos sobre los alimentos que circulan de boca en boca o incluso a tomar medicamentos que ayuden a perder peso. Existen una gran cantidad de medicamentos para adelgazar.

Anorexígenos

Los anorexígenos los hay de dos tipos:
Los anorexígenos noradrenérgicos son los que afectan al sistema nervioso regulando el apetito.
Los anorexígenos serotoninérgicos afectan tambien el apetito de las persona, pero no tienen efecto estimulante.

Fluoxetina

La fluoxetina regula a un estado normal las serotoninas que son unos neurotransmisores que se encuentran en varias sitios del sistema nervioso central y que estan relacionados con el estado de ánimo de las personas, por lo que se recetan a pacientes que sufren depresión.

Orlistat

El orlistat bloquea una enzima situada en el intestino. Esta enzima metaboliza las grasas para que sean absorvidas por la sangre y usadas por nuestro organismo, pero con este medicamento esas grasas son evacuadas al exterior a través de heces.

Sibutramina

La sibutramina suspende del sistema nervioso el apetito y tambien causa efectos del tipo termogénicos, es decir, que favorecen la utilización de las grasas por el cuerpo.


Medicamentos termogénicos

Los fármacos termogénicos estimulan el sistema metabólico, es decir, reducen el apetito e incrementan el gasto de las calorías.
La efedrina y la cafeína eliminan la grasa corporal reduciendo el apetito, estimulando el gasto de las calorías y quemando las grasas.

Leptina

La leptina es una hormona que afecta al sistema nervioso y a los receptores del cerebro que se encargan de regular el peso corporal.

Consecuencias medicamentos para adelgazar

Todo medicamento es una droga, y si no esta controlada por un médico, especialista o nutricionista, puede resultar perjudicar para la salud: adicción, pérdida de efecto del tratamiento, engordar, hipertensión pulmunar, fiebre, escalofríos, convulsiones, náuseas o vomitos, dolor muscular, dolor de estómago, diarrea, disminución colésterol en sangre, cefalea, insomnio, extreñimiento, aumento tensión arterial y aumento ritmo cardiaco.

Para perder peso es muy aconsejable ponerse en manos de un especialista que nos ayudará a adelgazar con un método apropiado a nuestro organismo.